Apariciones y Alucinaciones
En el mundo de la Espiritualidad, incluyendo religión, las visiones o apariciones religiosas comprenden revelaciones inspiratorias, como la aparición de la Virgen María a los niños de Fátima, generalmente de un estado futuro y/o de criaturas míticas. Algunos creen (los seguidores de ciertas religiones) que vienen de una deidad, a veces directa o indirectamente por vía de profetas, y sirven para inspirar a los creyentes como parte de una revelación divina o epifanía. Muchos místicos entienden la palabra visión como sinónimo de aparición. Una alucinación es una percepción que no corresponde a ningún estímulo físico externo. Sin embargo, la persona siente esa percepción como real. Por ello, la alucinación es considerada como una falsa percepción dada la ausencia de un estímulo externo.
Las visiones religiosas son generalmente categorizadas como milagros. Dios, los ángeles, el demonio, los ausentes o algunos animales de naturaleza híbrida y fantástica son por lo común, los agentes de estas manifestaciones. Decimos, por lo común, porque la aparición, no siendo mas que un juego de la imaginación toma igualmente todas las formas y no puede someterse a ninguna regla. Lo que prueba cuan inherente es esta debilidad a la naturaleza humana es que la vemos en todos los pueblos y en todas las épocas de la historia y que no hay un solo monumento escrito entre los más antiguos que no contenga la relación de algún hecho de esta especie.
Apariciones o alucinaciones de ángeles son frecuentes en libros sagrados
Las alucinaciones pueden ocurrir en cualquier modalidad sensorial - visual, auditiva, olfativa, gustativa, táctil, proprioceptiva, equilibrioceptiva, nociceptiva, termoceptiva o varias mezcladas. Jean Étienne Dominique Esquirol fue el primer psiquiatra que utilizó el término con su significado actual en la década de 1830, si bien se empleaba desde el siglo XVI para designar a "una mente que divaga"
Apariciones
El sabio Calmet, que nos ha dejado sobre esta materia un trabajo especial y curioso, divide las apariciones en cuatro clases:
- La de los buenos y la de los malos ángeles
- La de los muertos
- La de los hombres vivos
- La de los ausentes y que se efectúan sin su participación
Pero Calmet no ha comprendido en esta clasificación mas que los géneros mejor conocidos de la especie, si podemos decirlo así, sin hacer entrar en ellos todos los fenómenos que se producen en este mundo singular. La aparición de la Divinidad y la de los buenos o de los malos ángeles son comunes a la historia de todas las religiones practicadas sobre la tierra y no se puede dudar que este medio ha sido uno de los más poderosos que Dios ha empleado para manifestar a los nombres su voluntad.
Sin investigar Calmet con qué grado de realidad pueden tener todas estas visiones consignadas en los escritores profanos y en las obras de los doctores y de los hagiógrafos, no limitaremos a señalar las diferencias y las relaciones que existen entre estas variaciones y las que nos han sido conservadas en la colección de las Santas Escrituras.
También demonios son frecuentes en apariciones y alucinaciones
Aparición de ángeles
La aparición de los ángeles, se sabe que es frecuente en el Antiguo como en el Nuevo Testamento. Se reproducen con las mismas circunstancias: un ser sobrenatural que toma la forma humana, pero dotado de una belleza superior, viene a manifestar a los elegidos del Señor su suprema voluntad. Un rostro brillante de luz con vestidos de una blancura deslumbradora y con alas son los signos ordinarios de su carácter, que pueden a su voluntad ocultar o dejar ver. En cuanto a la aparición de Dios mismo no se puede citar más que un corto número de ejemplos y en la nueva ley, es Jesucristo, es principalmente su madre María, los que consienten en revelarse a los hombres para darles valor y consuelo.
Entre los pueblos antiguos, la aparición de los infinitos dioses que habían creado era muy frecuente: iba acompañada de prodigios naturales que variaban según la cualidad del personaje cuya presencia anunciaban. El buen o mal genio reemplazaba entre los antiguos el buen o el mal ángel y en todas las circunstancias notables de su vida estaban convencídos de ver aparecer el genio particular que creían tenía la comisión de su guarda.
Acerca de las apariciones, los griegos y los romanos se habían formado una teoría completa cuyos principios se han expuesto como sigue por Calmet: Las apariciones de los dioses son muy luminosas; la de los ángeles y la de los arcángeles son menos; la de los demonios oscuras, pero menos que la de los héroes. Los arcontcs que presiden lo que hay en el mundo de mas brillante son luminosos, pero aquellos que no se ocupan mas que de las cosas materiales son oscuros. Cuando las almas aparecen se asemejan á una sombra.
Aparición del demonio
En cuanto al genio del mal, que en los tiempos modernos han llamado vulgarmente el diablo, en todos los pueblos, en todas épocas, y según las creencias de todas las religiones, se ha mostrado muy a menudo a los que ha querido seducir o asustar. Para este último fin ha conservado su forma natural que es siempre fea y repugnante o también, si la repugnancia de aquel que procura vencer por un animal o un objeto cualquiera le es conocida, no ha dejado de tomar su figura. Al contrario, ha concebido el proyecto de seducir a aquellos a quienes se aparece, el diablo se reviste en estas circunstancias de las formas más seductoras. No toma solamente la cara de una mujer joven y bella sino la de un joven dulce, humilde, política, que hace al hombre bástante desgraciado para invocarle mil y mil promesas a las cuales no se resiste lo suficiente. A estos talentos superiores, descontentos de todas las incertidumbresque la ciencia humana no permite resolver y que solamente a Dios pertenece conocer, se aparece muchas veces el diablo bajo la figura de un hombre de elevada estatura, vestido todo de negro con las facciones del rostro singularmente pronunciadas y de una grande fealdad: ranchas veces no teme exponer toda su deformidad y de poner sus uñas largas, negras y puntiagudas sobre el pecho del audaz que quería penetrar los misterios da la naturaleza. Nada es tan curioso como estas largas historian que los escritores taumaturgos de todas las naciones han recogido sobre todas las apariciones del mal genio. La nomenclatura de las obras donde se encuentran sería por sí misma bastante larga.
Aparición de Monstruos en el arte japonés
Apariciones de muertos
La aparición de los muertos es una creencia que ha sido conocida en todos los pueblos. Entre los hebreos como entre las naciones paganas mas célebres, entre los griegos y los romanos, no se dejaba de hacer a los muertos los honores fúnebres que les son debidos pues se temía verlos aparecer con alguna queja. Los antiguos creían también que hombre que se había manchado con algún crimen y que había muerto sin ser castigado, debía, para expiar, andar errante mucho tiempo fuera de su tumba. Agatinas refiere que muchos filósofos griegos, habiendo encontrado en las cercanías de Constantinopla un cadáver sin sepultura, le hicieron enterrar por sus esclavos. Sobrevino la noche y el cadáver apareció a uno de los filósofos rogándole que no diese sepultura al que era indigno de ella, que la tierra miraba con horror a los que la habían manchado. Al día siguiente fue hallado el cadáver en el mismo sitio que antes y los viajeros griegas supieron que este hombre había cometido en otro tiempo un incesto espantoso.
Se encuentra en las crónicas de la edad media a propósito de los muertos católicos culpables de algunos crímenes y, sobre todo, en materia de religión, numerosas historias muy repetidas por los predicadores y los escritores ascéticos. Puede leerse en las crónicas de San Dionisio la relación de la famosa aparición de Carlos Martel y Carlos el Calvo que no temieron entregar a las manos seculares los beneficios eclesiásticos.
Hé aquí un hecho análogo narrado por Alberto el Grande y por el autor del Racional de los divinos oficios Guillermo Durand. Guillermo, canciller de la iglesia de París, sostenía que la pluralidad de los beneficios era permitida. En su lecho de muerte supuestamente fue visitado por el obispo de París que le aconsejó que renunciase a semejantes doctrinas y que resignase todos sus beneficios. Rehusó declarando que quería experimentar si esto era un crimen tan grande como se pretendía, el castigo condigno; murió en 1237. Pocos días después el obispo de París, que se llamaba también Guillermo, se encontraba rezando en su catedral y vio levantarse de repente delante de él el espectro de un hombre repugnante. El obispo se persignó y pidió al espectro que se dejase conocer. soy, dijo el espectro, el miserable canciller de tu iglesia condenado al suplicio eterno por no haber distribuido a los pobres el escedente de mis beneficios, por haber sostenido que era permitido poseer muchos y por haber cometido el pecado de la incontinencia.
¡La paz sea con vosotros! (Cristo que aparece a los apóstoles) en óleo del artista Mironov
Otras apariciones
Entre las innumerables historias de apariciones de diferente naturaleza que han llegado hasta nosotros, se puede citar algunas que pertenecían a personajes ilustres o bien a hechos notables de la historia universal del mundo. Entre los antiguos, es Sófocles advertido por Hércules del robo de una copa de oro cometido en perjuicio suyo; Simónidas, próximo a embarcarse, da la sepultura a un cadáver que encuentra en la playa y que se le aparece pocas horas después para advertirle que la nave a bordo de la cual va a partir naufragará; Julio César después de pasar el Rubicón, es detenido por un espectro que le predice su suerte; en fin, Bruto, estando a punto de pasar a Europa y de emprender la guerra contra César, donde debía sucumbir, es visitado en su tienda por un mal genio que le anuncia su próximo fin.
Entre los modernos es necesario anunciar la aparición del diablo a Lutero, que pretendió razonar con este doctor sobre el sacrificio de la Misa. Pero Lutero, advertido pronto por los razonamientos capciosos del espíritu maligno no tardó en convencerle y en echarle vergonzosamente.
Alucinaciones
La alucinación como experiencia es de interés para varias ciencias tales como la neurología, la psicología y la psiquiatría. Como tal la alucinación es una palabra recurrentemente mencionada en trastornos tales como algunas variantes de la esquizofrenia, aunque técnicamente aparece también mencionada en experiencias místico-religiosas, y así también como parte del consumo de drogas y estupefacientes al igual que la presencia de cáncer y también en los trastornos del sueño.
Por ejemplo existen las alucinaciones floridas que se asocian usualmente con el uso de drogas,al alcoholismo, a la privación del sueño o a trastornos neurológicos.
Sin embargo, hay estudios que muestran que las experiencias alucinatorias son comunes en la población general (Investigaciones en EEUU). Se ha informado que cerca del 10% de la población experimenta alucinaciones leves o sutiles. Una encuesta más reciente y mucho más completa y amplia con un número de personas cercano a 13.000, reveló que 39% de las personas afirman experimentar experiencias alucinatorias vívidas y severas, no necesariamente vinculadas con el uso de drogas. Las alucinaciones acústicas o auditivas también existen.
Existen diferentes aproximaciones teóricas a la causa de las alucinaciones. El mayor peso lo tienen teorías de orden biológico que postulan deficiencias en el funcionamiento normal del cerebro y de las conexiones sinápticas entre células ciliadas y las presentes en el tallo encefálico y en los lóbulos occipital-temporal. Se piensa que es de particular importancia el neurotransmisor dopamina en estas disfunciones.
Una explicación más sencilla se refiere a alucinaciones originadas por el propio funcionamiento de nuestro sistema perceptivo. Así hay que comprender que la sensación percibida es una construcción del cerebro a partir del estímulo físico de entrada. Por ello, a veces el cerebro construye sensaciones erróneas cuando no debería hacer nada. Por ejemplo, algunas personas que tienen un defecto en la retina, por enfermedad o accidente, empiezan a ver objetos dentro de esa zona físicamente ciega llamada escotoma. Esto es así porque al no haber señal desde la retina, el cerebro se halla ante el dilema de borrar la zona visual dañada o empezar a rellenarla de forma impredecible.
Otro ejemplo de alucinación se da en el caso de miembros amputados en los que el paciente empieza a experimentar miembros fantasmas: Los sigue sintiendo a pesar de que ya no los tiene. Esto es así por la misma razón que el escotoma: El cerebro se halla ante el dilema de "amputar" funcionalmente el área del cerebro encargada del miembro amputado o rellenarlo de forma imprevisible.
Por lo general las alucinaciones no se analizan como un aspecto separado sino dentro de un cuadro más general de trastornos relacionados a estos episodios alucinatorios.
(Para subtítulos en español toque "cc" abajo a la derecha en el video)
Percepciones adecuadas al nivel de conocimiento
Los psicólogos Vladimir Y María Mercedes Gessen, en su libro ¿Quién es Dios?, cuentan: "Un sacerdote católico y misionero –el padre Pedro- se adentró junto a un grupo de exploradores en lo profundo del Amazonas, en una piragua (pequeña embarcación amazónica) con un motorcito fuera de borda, y entraron en contacto con un grupo aborigen que nunca había tenido relación con seres provenientes de otros lares, ni con la tecnología que representaban. Así, luego de los contactos iniciales por señas, ambos grupos humanos se entendieron y se dispusieron a pasar la noche. A la mañana siguiente, los exploradores y el padre Pedro quedaron estupefactos cuando al lado de la piragua, y del motor de la embarcación, había una ofrenda de frutas, flores y alimentos provenientes de la selva. Obsequio que no estaba destinado para ellos, sino para la piragua, mejor dicho, para el pequeño motor de la piragua. Los aborígenes estaban convencidos que el motor ¡Era un ser viviente! y una ¡Deidad!... Más tarde, explicarían que ellos creían que ese enviado de los Dioses –el motor- había traído a sus navegantes como querubines para favorecerlos y protegerlos... La ofrenda fue porque suponían que el motor, o este diminuto “Dios” estaba enojado, y por ello bramaba o rugía, haciendo referencia a cuando el motor estaba encendido. Para los nativos, era imposible suponer que algo pudiera tener un sonido como un motor prendido y menos que se moviera por sí mismo, sin ser ¡un ente viviente!...."
Igualmente los Gessen analizan en su libro los casos de "falsas percepciones" en distintos casos bíblicos como las narraciones de Noé, Moisés, Ezequiel o Jonás, entre otros.
Una falsa percepción se produce ante un hecho real pero que es interpretado por la persona de forma distinta a la realidad del suceso. Noé por ejemplo narra un diluvio , el cual ha sido generalizado por algunas religiones como una exterminación de la humanidad en una inundación planetaria o universal. Seguramente Noé se refería a una crecida de aguas o de un tsunami en su comunidad o comarca. Noé no sabía que la Tierra era un planeta, que era redondo, y que estaba poblada en otros continentes, donde esto no ocurrió en ese momento. Las inundaciones y otros tipos de catástrofes naturales se dan en distintos tiempos y lugares. Históricamente no se puede hablar de maremotos, terremotos, tsunamis, inundaciones, huracanes, tornados, deslaves, avalanchas, crecidas de ríos, y otras catástrofes de este tipo como universales. Solamente se puede aplicar un criterio mundial en caso de pandemias.
Ilusión
El término ilusión se refiere a una percepción o interpretación errónea de un estímulo externo real. Por ejemplo, ver un animal donde sólo hay vegetación o interpretar una sombra en una calle oscura como si fuera una persona. Este tipo de interpretaciones ha llevado a muchos autores a definir las ilusiones como el resultado de la combinación de poca claridad perceptiva, falta de conocimiento y un estado emocional intenso. Otro tipo de ilusiones son las conocidas como ilusiones ópticas y las pareidolias.
Aunque cualquier persona puede experimentar ilusiones sin que ello suponga un estado patológico, algunos trastornos psicológicos pueden incluir ilusiones patológicas. Por ejemplo, una persona con psicosis paranoide y la idea delirante de que un grupo de personas está planeando su muerte, al oír una conversación cualquiera entre un grupo de desconocidos, podría creer que escucha su nombre e interpretar que existen planes para asesinarlo.
Le invitamos cordialmente a leer nuestro libro: ¿Quién es Dios?
¡Gracias! por visitarnos, Vladimir y María Mercedes Gessen @DivanGessen @UnDiosUniversal
Fuentes: https://es.wikipedia.org/wiki/Aparici%C3%B3n
https://es.wikipedia.org/wiki/Aparici%C3%B3n_religiosa
https://es.wikipedia.org/wiki/Alucinaci%C3%B3n
https://es.wikipedia.org/wiki/Ilusi%C3%B3n
http://www.diosuniversal.com/Quien-es-Dios/Capitulo-1-Quien-es-Dios-para...
https://www.youtube.com
Fotos: https://commons.wikimedia.org/wiki/Main_Page
https://commons.wikimedia.org/wiki/File%3AChildren_of_F%C3%A1tima.JPG
https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Apparition_of_the_monstrous_cat.jpg